La presidencia española de la Unión Europea ha propuesto poner en marcha unas negociaciones a seis bandas para ayudar a desbloquear las actuales conversaciones sobre la reunificación de Chipre, en las que estarían presentes la ONU además de la propia España, en representación de la UE.
La propuesta, que prevé la participación en las conversaciones de paz en la isla mediterránea de Turquía, Grecia, el gobierno grecochipriota, la República Turca del Norte de Chipre (KKTC, en turco), Naciones Unidas y la Unión Europea (representada por España), ha sido aceptada hasta ahora por Ankara, según fuentes diplomáticas confirmaron este martes.
Por su parte el presidente grecochipriota Dimitris Christofias mostró su conformidad con la iniciativa siempre y cuando el primer ministro turco Recep Tayyip Erdoğan estuviese de acuerdo en reunirse por separado con él. A su vez Turquía aceptó la condición impuesta por Christofias, pero pidió a cambio de forma recíproca que el primer ministro griego Papandreu se reuniese por separado con el presidente turcochipriota Mehmet Ali Talat.
Desde que España asumiera la presidencia semestral de la UE el pasado 1 de enero, el titular del Ministerio de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, asumió la culminación con éxito de las conversaciones para la reunificación de Chipre como una de sus prioridades. España además está especialmente interesada en desbloquear las negociaciones dado que eso eliminaría un serio obstáculo a las negociaciones para el ingreso de Turquía en la UE, que el gobierno español apoya firmemente. Moratinos es además un gran conocedor de Chipre y mantiene buenas relaciones con todas las partes implicadas, ya que pasó seis años en la isla como representante especial de la UE para Oriente Medio.
Otra de las razones por las que sale en estos momentos esta iniciativa son las elecciones presidenciales previstas para el próximo mes de abril en el norte de Chipre. Las encuestas apuntan a una probable derrota del actual presidente turcochipriota Mehmet Ali Talat en favor de su rival nacionalista, favorable a mantener el actual status quo de la isla y hacer definitiva la división en dos estados, lo que dificultaría enormemente cualquier solución negociada al conflicto.
La cuestión de los derechos de propiedad
Una reciente sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos relativa a los derechos de propiedad en Chipre también ha contribuido sin duda a suavizar la postura de los grecochipriotas, precisamente en uno de los temas -la reclamación de los derechos de propiedad- que más estaban ralentizando las negociaciones de paz en la isla.
El alto tribunal europeo dictaminó hace un par de semanas que la Comisión de Propiedad Inmobiliaria (IPC) de la República Turca del Norte de Chipre es un organismo plenamente válido y con competencias para dictaminar sobre los litigios de grecochipriotas con propiedades en el norte de la isla, de mayoría turca.
El veredicto tiene importantes implicaciones sobre las reclamaciones de propiedades por parte de los habitantes griegos de la isla, ya que supone que aquellos grecochipriotas que tuvieran propiedades en el norte de Chipre antes de su división deberán apelar al IPC en sus demandas, algo que hasta ahora se habían negado a hacer por no considerarlo un organismo válido. Fuentes diplomáticas aseguran que a los grecochipriotas sólo les queda apelar al IPC y reconocer su autoridad, o resolver de una vez por todas la cuestión de los derechos de propiedad a través de las negociaciones de paz con los turcochipriotas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario