La adhesión de Turquía será la prioridad de la presidencia española de la UE

ANKARA

La adhesión de Turquía a la Unión Europea será la principal prioridad de la presidencia rotatoria de la UE, que España asumirá durante seis meses a partir del 1 de enero de 2010. Así se lo expresó el ministro de exteriores español, Miguel Ángel Moratinos, a su homólogo turco Ahmet Davutoğlu, en un encuentro que ambos mantuvieron en Nueva York en el marco de la reunión de la Asamblea General de las Naciones Unidas.

Los dos ministros trataron además durante la reunión temas relacionados con la iniciativa de la Alianza de Civilizaciones, patrocinada por la ONU pero puesta en marcha por los gobiernos turco y español, y tanto Moratinos como Davutoğlu estuvieron de acuerdo en calificar el proyecto como una de las iniciativas más exitosas de Naciones Unidas.

Por su parte el ministro turco responsable de las negociaciones con la UE, Egemen Bağış, volvió a subrayar la determinación de Turquía por ingresar como miembro igual y de pleno derecho en la Unión, a pesar de todas las dificultades que se le presentan en el camino. Bağış pronunció estas palabras durante una conferencia pronunciada en la Universidad de Harvard titulada "Una relación mútuamente beneficiosa: Turquía y la Unión Europea". Allí el ministro turco no dudó en calificar a la UE como el proyecto de paz más importante de la historia, pero un proyecto que según Bağış "no estará completo hasta la adhesión de Turquía. Turquía es parte de la solución a todos los principales problemas que afronta la UE".

Bağış señaló también que las Fuerzas Armadas Turcas constituyen actualmente la segunda mayor fuerza militar de la OTAN tras las de Estados Unidos, por lo que juega un papel crucial en la seguridad trasatlántica. "Turquía es el único país que es miembro del G-20, la OTAN, la OCDE, y la Organización para la Conferencia Islámica al mismo tiempo", destacó.

"1.500 millones de musulmanes de todo el mundo siguen atentamente el proceso de adhesión de Turquía a la UE. La Unión Europea fue diseñada como un proyecto político de paz, no surgió como un club cristiano. Y su esencia es la diversidad", subrayó el máximo responsable de las relaciones Turquía-UE. "Ahora, tenemos la oportunidad de hacer de Europa un lugar de ideales compartidos y objetivos comunes. Demostraremos que el Islam y la democracia pueden co-existir, demostrando que la cultura y la religión no son un obstáculo para el progreso y la democracia", dijo Bağış.

El ministro turco indicó además que según datos manejados por la propia OCDE Turquía se convertirá en el tercer país de crecimiento económico más rápido en el mundo para el año 2017, por detrás de China e India. "Nuestra economía se sitúa como la 6ª mayor economía de Europa y la 17ª del mundo. Por tanto, Turquía se está convirtiendo en una parte inevitable del futuro de la economía europea. Turquía es también el garante de la seguridad energética de Europa, debido a su posición geográfica", comentó durante la conferencia.