ANKARA
Un estudio titulado "Violencia Doméstica contra las Mujeres en Turquía" llevado a cabo por el Consejo General de la Situación de la Mujer (KSGM, en sus siglas en turco) ha puesto de manifiesto que muchas mujeres turcas no perciben la violencia doméstica como un problema grave.
La encuesta se realizó entre 17.168 mujeres de un total de 51 provincias turcas. Según el estudio, el porcentaje de violencia física contra las mujeres es del 38% en las ciudades y del 43% en las zonas rurales, mientras que el 25% de las entrevistadas dijo haber sufrido heridas físicas como consecuencia de malos tratos. Además, el informe señala que en torno a un 55% de estas mujeres no tienen ningún tipo de educación. Casi la mitad de las mujeres que habían sufrido malos tratos indicaron que no habían contado a nadie que su marido las maltrataba.
Según el estudio, el 14% de las mujeres turcas afirmó que en algunas ocasiones era aceptable que un marido golpease a su esposa, mientras que el 64% de las mujeres que habían sufrido algún tipo de violencia dijeron no haber buscado ayuda porque consideraban que no era un gran problema. Aproximadamente un 32% de las mujeres que participaron en el estudio manifestaron que los problemas con las familias de sus maridos constituían la principal causa de conflicto y malos tratos en sus vidas, mientras que casi un 40% dijo haber sufrido algún tipo de violencia por parte de sus maridos o ex maridos.
La encuesta muestra que el 14% de las mujeres que participaron consideraban aceptable en determinadas ocasiones que los maridos golpeasen a sus esposas y que las madres golpeasen a los hijos, mientras que un 49% declaró que las mujeres no deberían discutir con sus maridos. Entre las causas citadas como origen de los conflictos y la violencia doméstica, las encuestadas mencionaron problemas con sus suegros (32%), problemas económicos (18%) o temas relacionados con los niños (13%), además de otras causas como no obedecer a sus maridos, la frustración, los celos o ninguna razón en particular.
Las víctimas no buscan ayuda
Uno de los datos más significativos que arroja este informe, además de la alta tolerancia al maltrato entre las propias mujeres maltratadas, es que casi el 90% de las mujeres que sufrieron algún tipo de violencia doméstica no buscaron ayuda por parte de ninguna organización. Únicamente el 4% acudieron a la policía, un 4% contactaron con un abogado, otro 4% acudieron a un hospital o un centro de salud y tan sólo un 1% buscaron ayuda en un centro de apoyo a mujeres, un centro municipal o en la Agencia de Servicios Sociales y Protección a la Infancia (SHÇEK, en sus siglas en turco).
Entre las mujeres que no decidieron buscar ayuda en alguna institución u organización tras sufrir maltrato, un 55% dijo haber compartido sus problemas con amigos o familiares. Además, una de cada tres mujeres maltratadas afirmó haber considerado la posibilidad del suicidio en algún momento de su vida a causa de los malos tratos que sufría.
Cifras a tener muy en cuenta
Tras dar a conocerse los datos del informe, la Ministra de la Mujer y la Infancia Nimet Çubukçu calificó como muy importantes los resultados y dijo que Turquía debía afrontar el grave problema de la violencia contra la mujer, a la vez que prometió nuevas iniciativas desde su ministerio para prevenir el maltrato.
Çubukçu subrayó la importancia de analizar cuidadosamente los resultados de este estudio, y destacó que los programas y políticas contra la violencia doméstica necesitaban ser actualizados y fuertemente potenciados.
Un grave problema también en la Unión Europea
Pero la violencia doméstica no es sólo un problema que afecte a Turquía, ni mucho menos. Según declaró Andreas Laggis, miembro de la Delegación de la Comisión Europea en Turquía, una de las principales causas de muerte en Europa entre las personas de 16 a 44 años es la violencia doméstica. Laggis señaló además que la violencia doméstica acaba con más vidas cada año en Europa que el cancer o los accidentes de tráfico.
Además subrayó que en la UE una de cada cinco mujeres está sometida a algún tipo de violencia, que una de cada tres mujeres muertas en Inglaterra lo son a consecuencia directa de la violencia doméstica, o que la mitad de las mujeres asesinadas en Irlanda lo son a manos de sus parejas.
Laggis destacó que la violencia contra las mujeres no entiende de regiones, razas o culturas, e hizo incapié en que la violencia doméstica tiene lugar en la intimidad del hogar, un lugar donde cualquier persona debería gozar de protección pero que a menudo se convierte para muchas mujeres en una peligrosa pesadilla.
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