La capital administrativa de Hatay, Antakya (la antigua Antioquía), con su maravilloso museo de mosaicos, la Iglesia de San Pedro en una cueva y una gran variedad de hoteles y restaurantes, es el primer, y normalmente único, objetivo de los que visitan la provincia – pero hay mucho más que ver.
Según te diriges a Hatay por el norte, merece la pena saber que una de las batallas más importantes de la historia tuvo lugar no lejos del moderno asentamiento de Dörtyol. Allí, en el año 333 a.C. Alejando Magno derrotó al rey persa Darío en la batalla de Issos. Más de 110.000 soldados de Darío se encontraron con su final allí, donde el Imperio Persa fue herido de gravedad. Más al sur, cerca de la pequeña ciudad de Yakacık, se encuentran los restos de un caravasar otomano y de edificios contiguos, el complejo de Sokullu Mehmet Pasha, incluyendo una mezquita y una madrasa.
Veinte kilómetros al sur se encuentra la ciudad portuaria que fundó Alejandro Magno tras su victoria en Issos, llamada Alejandría. El paso del tiempo transformó su nombre a Alejandreta, y más tarde adquirió su nombre turco, İskenderun, cuando pasó a formar parte de Turquía en 1939. A pesar de su rápido crecimiento e industrialización, İskenderun ha retenido mucho de su encanto, con un amplio paseo marítimo, bordeado por palmeras, la impresionante cadena montañosa de Amanus y un gran número de excelentes restaurantes. También a retenido parte de su cosmopolitismo, funcionando todavía iglesias ortodoxas, armenias y católicas.
Para llegar a Antakya por el norte es necesario cruzar la cadena de Amanus a través del espectacular paso de Belen, a unos 700 metros sobre el nivel del mar. Este es un lugar conocido para los amantes de las aves pues es una parte clave de las rutas migratorias, siendo a principios de octubre la época ideal para observar cómo las aves migratorias se dirigen al sur para pasar el invierno. Cerca se encuentran el espectacular castillo de Bakres, asentado en un saliento rocoso. Controlando la ruta de los cruzados hacia Tierra Santa, el castillo fue un lugar de gran importancia en mano de los templarios.
Justo al sur de Antakya está Harbiye, la antigua Dafne, donde se encontraron un gran número de los mosaicos que se exhiben en el museo arqueológico de Antakya. Dos de los amantes más célebres de la historia, Marco Antonio y Cleopatra, pasaron allí su luna de miel cuando Dafne tenía la reputación de decadente. Aunque no hay mucho que ver en la actualidad, es un lugar agradable, impregnado con el olor de los laureles que crecen allí en abundancia. De hecho, la palabra turca para laurel, "defne", viene de Dafne, una ninfa de la mitología griega que fue perseguida por Apolo y se salvó de las intenciones amorosas del dios por su padre, que la convirtió en un laurel en Dafne.
Los romanizados habitantes de Dafne eran conocidos por su libertinaje, pero en las colinas al sur y oeste de Antakya están los restos del Monasterio de San Simeón. Allí, en el siglo V, un cristiano llamado Simeón Stilita el Jovén, llevó al ascetismo a nuevos niveles. Defraudado por la decadencia de Antioquia y Dafne, Simeón deambuló por las colinas cercanas a la ciudad y se encadenó en lo alto de una columna. Estuvo 25 años sentado en la cima de columnas cada vez más altas (siendo la última de 13 metros) meditando y arengando a los que le visitaban en contra del libertinaje. Los peregrinos llegaban de todas partes para ver la ermita y el monasterio que se construyó alrededor de la columna. No queda mucho de todo ello, pero es un lugar bonito en el que se respira paz y tranquilidad, con vistas a los campos y a las azules aguas del Mediterráneo.
Hatay es célebre por su diversidad religiosa, con musulmanes sunníes, alevís, judíos, cristianos greco-ortodoxos y armenios viviendo codo a codo en la provincia. Aún más, si te diriges hacia Samandağ desde el Monasterio de San Simeón y luego subes por las pendientes más pequeñas de la elevada Musa Dağı ("la Montaña de Moisés"), te encontrarás con Vakıflı, la única comunidad rural armenia que queda en Turquía. La Iglesia de San Asdvadzadzin situada en el centro del pueblo no es especialmente vieja, pero ha sido restaurada bastante recientemente y merece echarle un vistazo.
Samandağ en sí no es especialmente atractiva, pero unos pocos kilómetros más allá se encuentra el moderno pueblo de Çevelik, llamado en tiempos antiguos Seleucia Piera, el puerto de Antioquía. Además de la vasta extensión de la playa, el principal punto de interés es el impresionante Túnel de Tito-Vespasiano. Construido durante el reinado de estos dos emperadores romanos, a finales del primer siglo después de Cristo, el propósito de este túnel de 1.400 metros de longitud excavado en la roca sólida por soldados y esclavos, era desviar el agua de un arroyo cercano para evitar que inundara la ciudad. El asentamiento fue fundado, como la propia Antioquía, por uno de los sucesores de Alejandro Magno, Seleuco, hacia el año 300 a. C.
Si te cansas de la riqueza histórica de Hatay, puedes consolarte con la fabulosa comida de la región, diferente a la típica comida turca, mostrando influencias árabes. Las especialidades van desde platos como el humus y bakla (un puré de alubias) a la muhamara (una nuez especiada con pimiento picante y trigo), y desde el tuzla tavuk (pollo asado en sal) al delicioso postre künefe (pan de kadayıf con queso y sirope).
Hatay es, a la vez, muy turca y un poquito árabe.
Cómo llegar allí
Hay vuelos regulares con Turkish Airlines (THY) desde Estambul y Ankara y con SunExpress desde Antalya hasta Adana, donde puedes alquilar un coche y dirigirte al sur hacia Hatay (el trayecto entre Adana y Antakya dura aproximadamente cuatro horas). Los vuelos desde Estambul son diarios mientras que desde Ankara hay cinco a la semana.
Dónde quedarse
Antik Beyazıt (http://www.antikbeyazitoteli.com/): Tel: (+90) (326) 216 2900. Encantador hotel boutique en un edificio de la época colonial francesa.
Saray Oteli: Tel: (+90) (326) 214 9001. Hotel céntrico a buen precio, perfectamente aceptable.
Dónde comer
Antakya Evi, en Sihali Caddesi. Precioso edificio antiguo con buena comida y licencia de alcohol.
Sultan Sofrası, en İstiklal Caddesi. Gran comida, muchos platos locales pero sin licencia para vender alcohol.
Guías
"Guía Azul de Turquía", "Lonely Planet de Turquía", "Guía Trotamundos de Turquía", "Turquía Costa Sur (Guiarama)".
10 comentarios:
TUVE LA GRAN SUERTE DE VISTAR ESTE PARAISO, HATAY, ISKENDERUN, BELEM, SON FASCINANTES...SU OLOR, LA IGLESIA DE SAN PEDRO EN ANTAKYA,EL AMBIENTE ROMANTICO, ALLI RESIDE MI PAREJA, ESPERO VIVIR ALLI ALGUN DIA, SUS MONTAÑAS, PLAYAS, EL PASEO DE ISKENDERUN CON SUS MONUMENTALES ESTATUAS, TODO FUE MÁGICO....ESPECTACULAR, NO TENGO PALABRAS PARA DESCRIBIR TANTA BELLEZA, ALI GÖDE TE ADORO
Çok güzel :)
yo tuve la dicha de estar en iskenderun,arsuz la verdad que quede enamorada de ese lugar y su gente , son hospitalarios gente calida y sincera, amistosos .Es una zona hermosa de playas y montañas en contraste con la las tiendas y restaurantes es en definitiva un hermoso lugar y en especial mi amor que se encuentra alla .
cuando regreso seguire conociendo , lastima que solo fueron pocos dias los que pase alla pero la verdad que con ese poquito que conoci quede enamorada y aun mas de mi amor.
OJALÁ ALGÚN DÍA ANTIOQUÍA (LUA ISKANDARUN) REGRESE A SER PARTE DE SIRIA.
POR CIERTO UNA DE LAS FOTOS EXPUESTAS PERETENCE A LA CATEDRAL DE SAN SIMEON EN ALEPO, SIRIA.
Efectivamente hay una foto de la Basílica de San Simeon en Alepo, ya que cuando escribí este artículo no encontré fotos del monasterio de San Simeón, que sí está a las afueras de Antakya y también alberga restos de la famosa columna.
Como seguramente ya sabrás, Antakya se unió a la República de Turquía en 1939 junto con toda la provincia de Hatay tras un referéndum, en el que la población tenía la opción de votar unirse a Siria, seguir como estado independiente (República de Hatay) o unirse a Turquía. La opción de integrarse en la nueva Turquía ganó por gran mayoría. De hecho, el poco tiempo que Hatay (incluyendo Antakya, o Antioquía) formó parte de Siria fue bajo la ocupación militar francesa -tras el fin de la Guerra Mundial y el reparto de Oriente Medio entre Francia y Reino Unido-, y aun así como región con una gran autonomía.
Es extraño, lo del referendum, ya que fue bajo ocupación militar, y sobre todo en la actualidad,se habla del "fuerte sentimiento pro-sirio de sus habitantes", que todavía hablan árabe, y conozco a algunos que se declaran sirios, a pesar de nacer en territorio de Antioquía (Hatay). Y obviamente Antioquía pertenecía a Siria, desde antes de los viajes de San Pablo (siempre se dijo Antioquía de Siria), la fundaron los Seleucidas. Y Siria pertenecía al imperio turco otomano, así que no hay como separar arbitrariamente(Siria - y su provincia Antioquía); y claro Hatay, es nombre turco dado por Ataturk, en pleno siglo XX.
El referéndum no fue bajo la ocupación militar (que en cualquier caso era francesa, no turca). Fue siendo ya un estado independiente. Y la "separación" que mencionas tampoco fue nada arbitrario, se hizo atendiendo a las peculiaridades de Hatay (o si lo prefieres, de Alejandreta); peculiaridades que aún persisten hoy día, como su diversidad cultural y étnica, incluyendo una mayoría poblacional de origen turco. Una cosa es lo que se "hable", otra bien distinta la realidad. ¿Has estado en Antakya? Allí no hay sólo "sirios" (creo que en realidad te refieres a la población de origen árabe) o sólo "turcos" (que todos son en realidad ciudadanos de la República de Turquía)... hay gentes de muchos orígenes distintos, con muchas religiones distintas: es una ciudad muy abierta y cosmpolita. Costumbres turcas y árabes, iglesias y mezquitas, conviven una al lado de la otra. Eso es precisamente lo bonito de Antakya.
Creo que todos conocemos gente de todas las ideologías, incluyendo nacionalistas (por ejemplo en España); pero eso no significa que todos los que allí viven -ni siquiera una mayoría- quieran la independencia. Quizás los nacionalistas sean siempre los que más ruido hagan; pero la voluntad popular entiendo que se mide en las urnas. Cuestionar ahora un referéndum que fue muy claro (guste o no su resultado), o convertir las aspiraciones de una minoría en voluntad de la mayoría, creo que no tendría mucho sentido y sobre todo que es el rumbo equivocado.
Por último, entiendo que para ti Antioquía sea "obviamente" parte de Siria (por algo lo dices), pero entiende que no lo sea para todo el mundo. Ni siquiera desde un punto de vista histórico (salvo que obviemos a todos los pueblos que han pasado por allí a lo largo de los siglos), pero esto sería muy largo de explicar, y en realidad no es lo que importa. La cuestión que verdaderamente importa aquí es que no se pueden mezclar las cosas, que esto no es el siglo IV AC, y que Antioquía es de todos sus habitantes, no de una minoría nacionalista "pro-siria" o de un estado que pueda reclamar ahora "derechos históricos": ¡Venga turcos, a reclamar Tesalónica, Bulgaria y el Jurasán! ¡Italianos, a por Córcega, Malta y España! ¡Griegos, tomad Macedonia y Constantinopla!)........ No le veo mucho sentido, la verdad.
O defendemos la democracia y la convivencia en pleno siglo XXI, o defendemos los nacionalismos minoritarios basados en la etnia y la Historia (y entonces, a la cola el último...). Pero todo a la vez, no se puede.
Saludos y que disfrutes de Siria, que es también un país muy hermoso.
Hola, me sorprende tu defensa de la versión turca de los hechos, creo que separar conceptos como árabes o sirios, no es la mejor manera de descibir los hechos. De todas maneras y mientras tanto hay que aprovechar los acuerdos entre Siria y Turquía que han eliminado las visas, a tí también suerte...
"me sorprende tu defensa de la versión turca de los hechos"... ¡¡Vaya!! ¿Es esta la versión turca? Pues fíjate, que yo sólo estaba dando mi opinión libremente (igual que tú, supongo) basándome en mi conocimiento de la Historia y del país, incluído de Antakya... Si hablar así es defender la "versión turca"... Bueno, pues entonces eso lo dice todo, ¿no crees? ¡Se ve que voy bien encaminado! :)
Ironías aparte, he publicado tu nuevo comentario porque creo que sin decir nada, dice mucho. Si mi opinión es distinta a la tuya no es porque sea la "versión turca" (en Turquía no me han lavado el cerebro, ni tampoco trabajo para el gobierno...). ¿Tu opinión entonces es la "versión siria"? Yo no me planteo así las cosas, lo siento, y creo que se entenderá que tampoco tiene mucho sentido continuar el debate en estos términos (de hecho, perdóname pero tengo la impresión de que sólo conoces Antakya de oídas...).
Tú has dado tu opinión basándote en unos argumentos, yo te he dado la mía basándome en lo que conozco del lugar y en lo que sé del tema. Es tan simple como eso. Te gustará más o menos, pero para eso se escribe amigo (o amiga, porque no sé con quién hablo), para debatir y para aceptar que alguien pueda responderte y tener una opinión distinta (¡incluso que uno pueda estar equivocado... qué tragedia!), sin que por ello tenga que ser la versión de nadie... Si no, no tiene mucho sentido.
Mantén la mente siempre abierta, y si de verdad crees en lo que dices (en este asunto y en cualquier otro) defiéndelo con argumentos, no descalificando una opinión ni cerrándote a escuchar una versión que no sea la tuya propia. Si no se parte de eso, y si después de poder expresarse libremente uno no ha podido dar más argumentos para defender lo que dice pero tampoco está dispuesto a que se le lleve la contraria... lo más sabio antes de seguir hablando por hablar es guardar silencio, y escuchar.
Ah, puedes echar un vistazo al apartado "¿Por qué este blog?" para conocer qué gran defensor de la "versión turca" he sido toda mi vida... :) Y como yo cada vez más gente, por fortuna.
La vida es cambio y aprendizaje, amigo.
Bol sans ve Allah versin.
FELICICDADES PABLO Y VIVA TU "VERSION TURCA", SALUDOS Y ESPERO SABER MAS DE TUS HISTORIAS VERDADERAS, QUIERO EMPAPARME MAS AL RESPECTO, SOY DE VENEZUELA Y ESTUVE ALLA EN ISKENDERUN, HATAY.
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