El presidente turco cree que en ese tiempo el país habrá cambiado mucho y que la UE comprenderá lo importante que es Turquía para ella.
ESTAMBUL
El presidente de Turquía, Abdullah Gül, cree que Turquía puede entrar en la Unión Europea dentro de unos siete años, momento para el que espera haya terminado el proceso de negociación con la UE. Gül realizó estas declaraciones en una entrevista difundida ayer por la cadena "France 24".
"Creo que una vez que hayamos acabado el proceso de negociación -puede que en cinco, seis o siete años, no lo sé, depende también de nosotros- tendremos una Turquía muy diferente a la de hoy, y estoy convencido de que entonces los miembros de la UE comprenderán que Turquía es un triunfo para la Unión", declaró Gül.
El presidente turco aseguró que Turquía ha hecho "reformas verdaderamente radicales" y ensalzó el proceso de modernización de su país, en el que está convencido de que "el germen de un golpe de Estado no está a la orden del día". Gül se refiría así al caso abierto contra la red conocida como "Ergenekon", cuyo juicio ha comenzado esta semana en Estambul. La acusación acusa a Ergenekon de gestar un plan para crear el caos en el país a base de asesinatos políticos y sentar así las bases para justificar un golpe de estado militar contra el gobierno del AKP.
"Lo importante es que en Turquía hay un sistema de Derecho que funciona", dijo Gül, quien recalcó que "el proceso ha comenzado de una manera transparente y abierta".
Por otro lado, preguntado por la crisis financiera, el presidente advirtió de que ésta "será sin duda uno de los principales problemas económicos de este siglo", porque "es la primera crisis del mundo globalizado". Gül se mostró partidario de una segunda conferencia de "Bretton Woods" para "crear un nuevo orden económico mundial", y afirmó que la crisis puede afectar al comercio mundial, que se ralentizaría, y también puede hacer que regresen las prácticas proteccionistas.
A este respecto, el Presidente Gül presentó a Turquía como un país que aprendió la lección de la crisis que en 2001 le hizo perder el 25 por ciento de su Producto Interior Bruto y llevó a la quiebra a varios de sus bancos, y aseguró que el país euro-asiático dispone en la actualidad de un "sistema financiero muy poderoso" en el que las reglas se siguen "con mucha atención".
NOTICIAS RELACIONADAS EN ESTE BLOG:
No hay comentarios:
Publicar un comentario